18 enero 2010

En la distancia...(parte de mi libro)

Matías se encuentra disperso en su habitación, mirando a través de una imagen creada por su memoria, por sus recuerdos, por sus síntomas de amor. En ese espacio personal y humano, se imagina que estará haciendo Camila, de cómo será la posición de su cuerpo con el cual sujeta su alma, que ropas se habrá puesto, cuáles serán los sonidos que ocultan sus oídos, de qué modo juegan sus pies con el suelo, muchas preguntas, y tal vez un monologo de respuestas: pueda que Camila en estos momentos también mire a través de su imaginación y su esperanza, pueda que esté sentada junto al umbral de su ventana, haciendo paraíso de la tarde al fijar la mirada en el horizonte; pueda que lleve puesto sandalias, vestido blanco, y un lazo de color azucena en la muñeca derecha; pienso que ella escucha la misma brisa corriendo por la piel, a las gaviotas trillando el cielo, a las olas salvando huellas de la orilla, y el movimiento de los botes a deriva.

(...)

Nuevamente, Matías y Camila se encontraron en Montreal, primero a pasos distantes, después con pasos a medio metro, y finalmente con las sandalias sobre los zapatos, así prosiguieron su camino a velocidad cero para seguir juntos....

NOTA.- Me resulto acertado que la siguiente canción intervenga en este post a modo de soundtrack.

Pamela Rodriguez y Pepe Alva - Aquí en la Nube

03 noviembre 2009

Pueda que suceda...

Pueda que suceda, en algún tiempo,
en algún lugar, en algún corazón.
Pueda que suceda, que la casualidad
se esté preparando para un encuentro
que ya tiene lugar en el mapa y tiempo fijo en el reloj.

Pueda que suceda que el tren de los recuerdos
ya partió, y quizás vuelva -¿quién pueda decirlo? -
solo aquella persona que piensa retroceder al tiempo por sentirse feliz,
o capaz la casualidad otra vez intervenga
en un reencuentro con el pasado...

Pueda que suceda, que la libertad del aire
sirva de señal para su llegada.
Pueda que suceda, que los pasos sobre la acera
signifiquen más si estuvieran acompañados por sus pasos.
Pueda que suceda, que la sonrisa juega con los recuerdos
y que el temblor de las manos
sea mas constante con el recuerdo de su tacto...
y ahora me veo, sentado como al comienzo de la historia
atado a los pies por la distancia del recuerdo
de haber pertenecido a una persona,
de haberle pisado los zapatos y ella a mí
para no alejarnos uno del otro, de reír y sonreír sobre los labios del atardecer...

-cierro los ojos al horizonte-

Pueda que suceda, que el tiempo ha girado en circulos
sin avanzar, y que la casualidad nos encontró
en este momento y en este corazón.

22 octubre 2009

Sueño un tiempo para compartir...

Sueño un tiempo para compartir,una tarde, una sonrisa, una flor que gira a través del jardín y brilla al amanecer buscando unos ojos para ser el cielo en el atardecer…

Sueño un tiempo para compartir, un arcoíris, un abrazo, una flor que comienza a caminar en junio y deja de buscar al abrirse los ojos de la tarde…

Me obsequiaste un mar al sur, me brindaste un tiempo para ser feliz. Me obsequiaste unos cielos de añil, me brindaste un sentimiento frugal…cálido al albor del mañana, febril por las noches.

Siento al tiempo pasar,Y no olvido al atardecer, y así sus ojos. Siento al sueño crecer,y no olvido la flor del sur, y así sus ojos

Me obsequiaste un mar al sur, me brindaste un tiempo para ser feliz. Me obsequiaste unos cielos de añil, me brindaste un sentimiento frugal…cálido al albor del mañana, febril por las noches.

05 setiembre 2009

Rumbo del Quetzal...

Vuela un quetzal en el regazo de tu almohada, duermes y desatas los cabos para soñar // aparece en pequeños tiempos las plumas del rumbo que te hace volar en libertad// sueñas con un mar sin olas agitadas sobre su remanso una mirada sensible // sobre tu sonrisa la tarde añil y una versión de azafrán en las manos
Mírame atenta, estoy sentado al frente de la catedral // Mírame atenta tengo un quetzal entre las manos // dejémoslo volar y nos enseñe el camino para soñar
Pasas por la primavera de la tarde que se ilumina con velas y aroma a café// y sentados en una banca de un centro cultural, nos retratan con felicidad //
Mírame atenta, estoy sentado al frente de la catedral // Mírame atenta tengo un quetzal entre las manos // dejémoslo volar y nos enseñe el camino para soñar
Mis ojos son tus ojos, tu tiempo es mi tiempo, mi boca es tu boca, tus manos son mis manos, Toma mi mano, sigamos con nuestra tarde en el rumbo del quetzal,
Mis ojos son tus ojos, tu tiempo es mi tiempo, mi boca es tu boca, tus manos son mis manos, Toma mi mano, sigamos con nuestra libertad de querer.
Autor: Yo.
Para: Ruel.

29 agosto 2009

Portento de la tarde...

Portento de la tarde, surco de aves
miras y agradezco que estés aquí...
Portento de la tarde, te reflejas en una nube,
y en la estación primaveral...
Portento de la tarde, hermosa figura añil,
píntanos el sentimiento de eternidad...
Portento de la tarde, vuelo de mariposa,
pon en nuestras manos al sol...
Portento de la tarde, sueños despiertos,
rosa de los vientos sigo junto a ti...
Portento de la tarde, estela de olas,
plumas de mar y vuela nuestro deseo...

Caminemos, rodeados de paz,
sonriendo al cielo,
miras y agradezco que estés aquí...

Caminemos, encontrando alegría,
sonriendo al cielo,
miras y agradezco que estés aquí...

31 mayo 2009

El quetzal y el mar...

He soñado con un mar
sin olas agitadas,
sobre su remanso
aparece en pequeños tiempos:
primero, una mirada sensible;
segundo, un caballo de nube
y sobre él galopa una sonrisa;
tercero, germinan palabras del mármol;
cuarto, una visión floral
de la aurora añil;
quinto, una versión
de azafrán en manos...

La imágen del Quetzal
irrumpe entre las olas,
extiende su manta esmeralda
y el sueño aun sigue girando

entre las gotas del rompeolas
y ahora...¿qué vendrá?
y se vé
que de sus manos versión de paloma
sale a vuelo el sol
agitando, junto al Quetzal,
una nueva sonrisa que se acuna
entre las sabanas del horizonte.

23 mayo 2009

¿Qué es el norte?

Olvidarás el olor a café,
los sonidos del mundo,
las conversaciones,
el contigo de tarde,
el nunca sin ti,
los segundos del faro,
el horizonte de pies puntillas,
el mar del norte,
y, ¿Qué es el norte?
ahora, el norte
es una mirada distante,
el surco de una gaviota
que se aleja
entre el jubilo de la tarde...

Y si quisieras de nuevo
sentir el café,
escuchar al mundo,
volver con una conversación,
ser compañía en la tarde,
estar presente siempre,
ser guía del faro,
tener el horizonte en los pies,
debes preguntarte
¿Que es el norte?
el norte es
una mirada constante,
una estrella vigilante,
el surco de un gorrión
atado a un futuro
que se aleja
entre el quetzal y el sueño libre
de la tarde…